MIRAR LA LUNA
Una noche de verano una mujer sale de su cabaña de madera para observar la Luna y se da cuenta de que no estaba la Luna y entonces se puso a buscarla y no la veía se puso las gafas y tampoco la vio, entonces cogió su telescopio portátil y lo montó y la buscó pero no la encontró. Entre galaxias, estrellas y cuerpos celestes había un pequeño planeta con un cartelillo que decía “Tierra”.
Aumentó la potencia de su telescopio y pudo ver su casa con la ropa tendida que había tenido puesta antes de ponerse el traje espacial y también su marido y sus niños comiendo pasta y viendo las noticias donde en ese momento salia una foto suya y el servicio de Investigaciones Espaciales informaba de su alunizaje sin ninguna novedad.
Y se quedó fuera disfrutando de la noche mirándolo todo con la boca abierta y totalmente en la Luna.
TISCAR FERNÁNDEZ GARCIA
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